SAN FRANCISCO LA CIUDAD DE LAS CUESTAS E INDIGENTES

Hemos madrugado a las 3 de la mañana para coger un taxi y estar en el aeropuerto a las 4 mañana, pero hasta las 4,30 no abrieron a facturar y el control de policía hasta las 5, el avión salía a las 6 a.m y llegamos a Atlanta a las 8 a.m. y teníamos dos horas para transbordo de un avión a otro. ¡Madre mía que aeropuerto! Como que es el de mayor tráfico del mundo. Habría unas diez pistas y aterrizaban y despegaban a la vez, pero todo con su orden, claro. Nos dio tiempo a ver bien de aterrizajes y despegues pues estando una hora antes en la puerta de embarque nos comunican que el avión no saldrá hasta las 12,30 por tormentas fuertes en San Francisco, en vez de a las 10 horas, así que todo el mundo se tiró por ahí donde pudo y a dormir y una cosa buena es que teníamos tele delante y vimos las noticias y hasta daban lo de las tormentas por todo California. Además mientras hay zonas para trabajar con el ordenador con enchufes y todos, restaurantes bueno de todo, estos americanos es todo a lo grande y la verdad que tienen un orden para todo y todo bien previsto.
Ya por fin a las 12,30 horas despegamos y llegamos a las 3 horas de allí, es decir 5,30 de viaje pero como hubo que atrasar otras 3 horas el reloj, es decir, ahora estamos a 9 horas menos que en España. En el vuelo fuimos con una señora que no se había cortado las uñas nunca, pero las llevaba cuidadísimas a la última decoradas, pero aún así daba un repelús…
Desde el aeropuerto cogimos el BART que por 8 $ te lleva al centro de la city. El hotel le teníamos en todo el centro, no nos costó mucho pero claro la habitación al lado del otro hotel era minúscula pero la cama era buena y el baño también que es lo importante. Esto es lo primero que hicimos solo llegar a la ciudad estabamos muertos de hambre y nos comimos en Union Square una pizza que estaba buenísima.

Tuvimos suerte que en la tarde dejó de llover y desde Unión square cogimos el tranvía que te lleva a la bahía y no veáis que subidas y bajadas, como las películas que vemos por allí. Ya a las 5 se hizo de noche y dimos un pequeño paseo por la bahía, deciros que San Francisco está lleno de vagabundos de todas las clases, yonquis, borrachos y pobres de verdad que no hacen más que pedir pero ya te ponen en los folletos de turismo en español que hay un centro donde les ayudan que nos les debemos dar nada, hubo uno que cuando íbamos por el paseo, menudo susto me dio, estaba tapado con dos ramas de árbol y según pasábamos al lado de él hizo ¡buh! Para asustarme y claro que lo consiguió y todo el mudo partiéndose de risa y yo poniéndole a parir y le veo que se estaba riendo con una cara pillo que no veáis, la escena que graciosa PERO EL SUSTO PRIMERO ME LO LLEVE , Llegamos hasta los leones marinos que les oíamos pero no veíamos, el pier 39 está decorado como lo de Eurodisney , todo con tiendas de todo y chocolaterías preciosas con muchísima variedad de bombones y chocolates, se ve que son tradición en esta ciudad, lo que pasa que después de ver las de Bariloche en Argentina, estas nos parecieron más sencillas que no lo eran. También está el puerto pesquero con sus restaurantes. Volvimos al centro en el mismo tranvía y ya nos fuimos a dormir a las 8 de la tarde pues el día anterior solo dormimos dos horas.

Estuvo toda la noche lloviendo y menudos truenos se oían y después de dormir doce horas, estuvimos toda la mañana caminando pues otra vez tuvimos suerte que se despejó, empezamos por Chinatown que aquí es una comunidad muy grande, más adelante por el barrio italiano y llegamos otra vez a pier 39. Luego fuimos caminando por la bahía dirección al puente famoso de esta ciudad el Golden Gate. Le hicimos unas cuantas fotos y al prisión de Alcatraz. Había un museo de barcos importantes en la historia de la ciudad.

Los levis aquí estan muy baratos y les tienen hasta por las paredes.

Vino de california pero carísimo

Las matrículas tipicas de por aquí.

Esta subidita o bajada hicimos en el tranvia el día anterior por esa zona todas las calles son así.

Desde hyde park cogimos la línea F que era otro tranvía más moderno que te lleva por parte de la bahía y todo Market St. Hasta Castro St. Y nos dijeron que allí cogiendo el bus 37 con el mismo billete (pues aquí los billetes duran 2 horas por 2$ y te pueden subir y bajar donde quieras) nos subia casi hasta" Twin peaks" y luego teníamos que subir como 200 escaleras en una de las dos montañas , desde allí tuvimos una panorámica de 360º de la ciudad y justo cuando estábamos en toda la cima vimos venir un nubarrón que entraba por el Pacífico y justo nos dio tiempo a bajarnos a la bus stop, el bus nos dejo otra vez en Castro St. Que tiene una bandera Gay enorme (más grande que la de la plaza Colón en Madrid). Y todas las farolas de las calles colindantes también con la bandera.

Cuando llegamos de la montaña allí nos metimos a un bar “twin peaks” porque estaba venga llover y necesitábamos cambio para el tranvía al centro y ya nos pedimos una beer and una coke era un bar estilo irlandés muy acogedor, al sentarnos y ver el tipo de gente nos dimos cuenta que era un bar gay y lesbianas , tenían una música muy agradable y la gente muy maja, sin problemas, ya nos entró hambre y a las 4’30 nosotros nos metimos en un restaurante a comer aunque para ellos ya estaban empezando con las cenas, allí por fin comimos algo sano, salmón fresco con verduras y salsa muy buena con una copita de vino blanco (DE CRISTAL).
Barberia típica

Linea F que te lleva por toda bahia y centro San Francisco

Bar lleno de gays y muy acogedor

Moto que estaba en el barriio que os imaginais

Luego nos cogimos el tranvía al centro y fuimos a la estación de bus a ver horarios para ir a Las Vegas o los Ángeles, pues queríamos haber ido a el parque de Yosemite pero por el temporal está cerrado así como haber ido a ver las famosas secuoyas pero lo tendremos que dejar para otra ocasión, si la hay. Allí nos dijeron que a los Ángeles 7 horas y a las Vegas 14 horas por lo que dijimos que nos íbamos a quedar en los Ángeles a descansar algún día.
Ya de camino al hotel al señor Don Alberto se le antojó entrar a uno de los bares-restaurantes que había por la zona que eran de los más lujosos de San Francisco, te abren la puerta , te recogen la chaqueta y te acompañan hasta la mesa, como nosotros ya habíamos hecho comida-cena nos dieron una carta de vinos y cócteles y nos pedimos dos vinitos rioja reserva que eran los más baratos PERO ERAN RESERVA, en ese momento le eché la bronca a Alberto por no haber ido al hotel – que estaba al lado- y cambiarnos un poco pues teníamos una pinta que no veas, pero no nos pusieron ninguna pega , uno está al negocio.
Y con esto y un bizcocho hasta mañana a las ocho que cogeremos el bus a ver las estrellas de Hollywood.
Best regards,

VISITA A OBAMA Y NOS QUEDAMOS SIN VERLE DIAS 16 Y 17

El sábado cogimos el metro desde el hotel y en diez minutos estábamos en la White house, nos hicimos las fotos de rigor por delante y por detrás, pregunté a los guardias de la puerta que si era la fila para entrar y al decirme que si nos pusimos en ella y a los diez minutos otro guardia gritaba algo hasta que me di cuenta que decía que había que llevar un ticket para entrar, ¡ya decía yo que muy fácil entrar a ver al Obama!. De ahí fuimos para el National Mall y los memoriales. Esta ciudad es impresionante, todos los edificios son enormes y las calles y avenidas también, nada que ver con New York city. Para 500.000 personas que viven aquí hay por lo menos dos aeropuerto y 5 líneas de metro. El metro y las calles son muy diferentes a las de NY, todo es nuevo y las calles perfectas porque mira que en NY como están las aceras para la gente mayor es peligrosísimo caminar pues te puedes tropezar con nada, como que vimos desde el bus como se tropezó un señor y no se que le ocurriría pero se calló de cara todo lo largo y se dio en toda la cabeza.

Volviendo a la visita por Washington , como todo parece cerca porque se ve a distancia y nos entretuvimos en los museos que aquí la mayoría son gratis (esta ciudad es más barata para visitar pues el metro también es a mitad de precio), solo entramos en uno pues a todos es imposible, y fuimos al del aire y del espacio, lo primero que hicimos fue tocar un trocito de roca de la luna, luego vimos misiles, el planeador de los Hermanos Wrigth, el módulo de mando del Apolo 11…., y nos metimos al IMAX (ese si que hubo que pagar) que nos contaron lo que hace un piloto desde su primer día con unas imágenes impresionantes.
Y al salir pasamos por el FBI que para visitarlo también tiene que ser con cita concertada con tiempo por temas seguridad, cuando quisimos llegar al Capitolio o Congreso estaba cerrado y nos tuvimos que conformar con hacernos la foto desde donde fue proclamado presidente Obama y se ve todo el escenario del final de la película de Forest Gump. Menos mal que pudimos entrar en la biblioteca del Congreso en otro edificio por detrás que también otra preciosidad.
Ya como eran más de las 5 de la tarde y todo estaba cerrado de allí fuimos hasta el barrio de Chinatown andando y menudo ambiente había por allí. Resulta que allí mismo hay un estadio enorme y no nos dimos cuenta hasta el día siguiente que estábamos en una galería tomándonos un café con una magdalena enorme con pasas, y no hacia más que pasar gente con camisetas de deporte y resulta que había habido un partido a las 3 de los Capital´s de Washington con otro que no vi el nombre, la pena no enterarnos antes y habíamos visto un partido de hockey, ya que estábamos allí.
Vimos un bar español llamado “la taberna” con tapas españolas, estaba a tope y por fin pudimos bebernos un vino en condiciones con unos calamares a la romana pero hubo que decir que sin mayonesa que es como se los ponen aquí. El vidrio como no se en un bar o restaurante no lo ves, en todos los burger o donde venden comida rápida todo es de usar y tirar y a recogértelo tu, así que de lavavajillas nada. En el bar preguntamos al camarero que era hispano -como la mayoría de los que hemos visto trabajando en la hostelería en estas dos ciudades- que donde iban los jóvenes ahora a divertirse y nos mando a un bar dos puertas saliendo que es un bajo y era un bar grandísimo, con dos salas en cada una 8 televisiones de plasma de por lo menos 50’ y otros 3 billares en cada sala, con música y de allí nos fuimos a la cama que ya era hora.
Al día siguiente buscando el billete de avión nos entretuvimos bastante buscando una buena oferta de vuelo que nos salió bastante económica pues hay que pensar que hacemos un recorrido de 6 horas de vuelo solo dos menos que a España. Cuando quisimos salir ya eran las doce de la mañana y estaba lloviendo a mares. Nos fuimos hasta el cementerio de Arlington que es enorme como todo de aquí claro. Fuimos a las tumbas de los Kennedy, a la mansión de los Arlington que estaban restaurándola, a la tumba del soldado desconocido que sin querer nos encontramos con el cambio de guardia(todo muy sobrio) y las 2111 tumbas tumbas de soldados desconocidos muertos en la Guerra civil.
A Alberto se le antojo ir al Pentagono que se puede visitar pero con antelación y el metro nos sacó justo al lado pero no dejaban hacer fotos, justo se ve el lado que todavía están restaurando después de los atentados del 11S. Y de allí nos fuimos a Chinatown y nos ocurrió lo que dije antes del estadio y ya nos recogimos al hotel pues el vuelo salía a las 6 de la mañana y había que estar dos horas y media antes allí.

Good Night

.